lunes, febrero 20, 2006

Veinticinco, XXV, 25,

Veinticinco es un número de la suerte, cuando se coloca una serie del 1 al 100, y, se le pregunta a distintas personas al azar, que elijan aquellos números que les parecen que atraen la fortuna, el amor, la salud, mencionan el 7, 25, 77, 88, 99, 100, las razones de estas opciones , obedecen a una especie de resonancia cósmica, suerte de esoteria no descifrada, que simplemente opera de este modo.

A los 25 años de matrimonio, se celebran las bodas de plata, una especie de medalla al valor en reconocimiento de los aguantes mutuos, la cuesta más díficil viene los próximos 25 años, período en que aparecen y brotan los achaques, cambian las conversaciones futbolísticas por recetas para subir la libido, bajar la presión, mejorar el colesterol, siendo recurrentes los estiramientos , liposucciones , y, en los menos afortunados los infartos , by passes, ataques de diabetes, y, otras menudencias.
Lo que si sabemos es que el 25 resulta ser el cuadrado perfecto de 5 , esto es,

5 ** ( 2 ) = 25, léase 5 al cuadrado.

También sabemos que 25 , se puede escribir como el producto de 4 números consecutivos , más uno, veamos :

1 x 2 x 3 x 4 + 1 = 25, y que

11 x 12 x 13 x 14 + 1 = 24 025 = 155 ** ( 2 )

generalizando al estilo gauss, podemos escribir lo siguiente :

n ( n + 1 ) ( n + 2 )( n + 3 ) + 1

que puede reescribirse como :

n** ( 4 ) + 6 n ** ( 3 ) + 11 n**( 2 ) + 6 n + 1

resultando :

( n ** ( 2 ) + 3 n + 1 ) ** 2 ,
ahora haga n = 1,2,3,4,5,6,7,8,9,10, ……..hasta que se aburra,

coloque los resultados en una serie, que puede denominarla con mi nombre,( también con el suyo), y, presentesela a algunos amigos matemáticos, ingenieros, astrónomos, físicos, verá que se romperán la cabeza tratando de descifrar esta espinuda cuestión,

Si hay algún candidato a yerno, nuera, pololo(a), pareja, amante, patas negras, o, como queramos llamarle, que tratando de pasar de listo, da con la solución en tiempo breve , no dude , estamos frente a alguién que puede mejorarnos el desgastado ADN familiar, así que ingenieselas para atraparlo, de lo contrario los nietos tendrán la misma cara de bobos que nosotros.

miércoles, febrero 15, 2006

Veinticuatro, XXIV, 24,

En una sala de reuniones, hay de tres sillas y dos personas, la pregunta es ¿ De cuántas maneras distintas, se pueden sentar simultáneamente estas dos personas, en las sillas ? La respuesta está dada por 3 x 2 x 1 = 3 !, léase tres factorial, cuyo resultado aritmético es 6,

Ahora bien, suponga que hay cuatro mujeres y cuatro sillas, en este caso, la pregunta es , ¿ De cuántas maneras distintas se pueden sentar las damas en las sillas ? , ( Puede agregarle algo de malicia, cambiando las sillas por caballeros, y, hacerse otra clase de preguntas, respetando el concepto de las posibles combinaciones ), La respuesta está dada por 4 x 3 x 2 x 1 = 4 !, léase cuatro factorial, cuyo resultado es el 24, ello quiere decir, que cuatro damas con cuatro sillas, ( o cuatro caballeros, idealmente que no lo sean tanto ), pueden sentarse, ( o permutarse ), de 24 formas diferentes. Ya sabe para la próxima fiesta, invite a cuatro parejas, deje los prejuicios de lados, y, ya tiene un swinging de 24 . Interesante númerito este 24.

Fueron los Babilonios, esos de por allá de Mesopotamia, ( no confundir con la profesora de historia del arte , que tenía, Manso Potamia, siendo la admiración de profesores y alumnos ), los que dividieron el día en 24 horas, en que cada hora duraba 60 minutos, y, cada minuto, en 60 segundos, Para los menos letrados, estamos hablando de alrededor de cuatro mil años atrás, que los días duraban 24 horas, y. así sigue hasta hoy, mostrando que este numerito tiene algo de inamovible.

Se me vienen a la memoria, 24 minutos de amor y sexo, las 24 horas de Lemans, las 24 semanas en la cartelera de un musical, los 24 años de un edificio en New York, y, las 24 campanadas en secuencia que conforma un carillón, este último, da motivo para un próximo post.